Así hoy me veras, culpable como yo soy
con elegancia primaveral, y en la sien aún tú voz.
¡Más yo renacere donde ayer reias vos!
Pegandolo en un papel, mutilado en la habitación.
Yo quise tenerte bien, en tí poder soñar.
En tus ojos desfallecer. En tú cuerpo poder nadar.
Remabamos la ciudad, cantando a más no poder.
Porque se hace correr a quien no sabe caminar.
El sol que mojo tú piel se desplazo con fragilidad.
Yo todavia me puedo ver, llorando: "Adíos, papá"
Es bueno así saber que ahora puedo volar,
pero sigo sin entender: ¿que fue lo que hice mal?
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